Un roast de celebridades es una tradición que se ha llevado a cabo en Estados Unidos desde hace varios años. Consiste en un evento en el que un comediante se encarga de hacer una serie de bromas y comentarios sarcásticos sobre una celebridad invitada, mientras ésta se sienta en una silla en el escenario y soporta las burlas.
El anfitrión es el comediante que se encarga de conducir el roast. Es el encargado de presentar al invitado, hacer una breve introducción y luego comenzar con las bromas. A menudo, el anfitrión también hace comentarios acerca de otros famosos que estén presentes en el evento.
Uno de los más reconocidos anfitriones de roasts es Jeff Ross. Ross ha conducido numerosos roasts y es conocido por su estilo sarcástico y su habilidad para hacer bromas sin ofender demasiado al invitado. También es conocido por su habilidad para improvisar, lo que le permite adaptarse a cualquier situación en el escenario.
El invitado es, por supuesto, la estrella del roast. Puede ser un actor, músico, comediante, o cualquier otro famoso que tenga suficiente notoriedad como para ser objeto de un roast.
Uno de los roast más conocidos fue el que se realizó en honor a Charlie Sheen en 2011. Sheen estaba en medio de una crisis mediática en ese momento, lo que lo convirtió en un blanco fácil para los comediantes. El roast fue un éxito y Sheen terminó admitiendo que disfrutó del evento.
Además del anfitrión, el roast también incluye a varios comediantes invitados que se encargan de hacer comentarios sobre el invitado. Estos comediantes suelen ser elegidos por su estilo irreverente y su habilidad para hacer reír a la audiencia.
Uno de los comediantes que se ha destacado en numerosos roasts es Lisa Lampanelli. Lampanelli es conocida por su estilo ofensivo y sin tapujos, lo que la ha convertido en una de las comediantes más populares en este tipo de eventos. Otros comediantes que han participado en roasts incluyen a Sarah Silverman, Amy Schumer y Anthony Jeselnik.
Generalmente, los comediantes que se muestran en el roast no son los que escriben las bromas. Para eso, se contrata a un equipo de escritores que se encarga de crear el material. Estos escritores deben conocer en detalle la vida del invitado, así como también tener habilidades para elaborar chistes y encontrar palabras que puedan ofender sin herir demasiado.
Uno de los escritores más reconocidos en este ámbito es Ed Bluestone. Bluestone ha trabajado en roasts desde los años 70 y ha escrito material para una gran variedad de comediantes, incluyendo a Joan Rivers, Richard Pryor y Eddie Murphy.
Por último, la audiencia también es un elemento importante en el roast. Esta es la que ríe (o no) ante las bromas y comentarios, lo que puede influir en la atmósfera general. En algunos casos, el público puede terminar abucheando a un comediante si considera que se está pasando de la raya.
El éxito de un roast depende en gran medida de la reacción del público. Si la audiencia se divierte, el evento puede ser todo un éxito. Pero si los chistes son excesivamente ofensivos, el público puede terminar sintiéndose incómodo y el evento puede ser un fracaso.
En conclusión, el roast de celebridades es un evento que involucra a varios protagonistas, desde el anfitrión hasta la audiencia. Cada uno de ellos tiene un rol importante que contribuye al éxito general del roast. Sin comediante, escritor, invitado o público, el evento no podría llevarse a cabo. Aunque a veces puede resultar ofensivo, el roast de celebridades se ha convertido en una tradición que sigue siendo muy popular en América.